lunes, 9 de septiembre de 2013

6 cosas que no deben hacer los padres si quieren que sus hijos crezcan felices

Padre e hijo.


Ser un buen padre no es algo que se aprenda en un curso o que se nazca sabiendo, pero sí se puede ir puliendo en el día.
,Óscar González, profesor y director de Escuela de Padres con Talento de España, señaló aldiario ABC algunos errores comunes que suelen cometer los progenitores con sus hijos, y que muchas veces impiden que un niño crezca feliz.
 
1. No prestarle atención o no dedicarle tiempo exclusivo.
“Una de las peores cosas que podemos hacer es no atenderlo (al hijo) pues el mensaje que le transmitimos es el siguiente: me importas bien poco”, señala Óscar González, añadiendo que es necesario dedicar como mínimo media hora en exclusiva al niño.
El profesional explica que es más importante la calidad del tiempo que la calidad. “Puede ser que al salir de colegio, nos muestre que ha hecho y su alegría. En ese momento requiere toda nuestra atención. Es más valioso para él ese instante que la media hora de después”, advierte.
2. Decirle que no lo quieres o amenazarlo con que lo vas a dejar de querer
El amor hacia los hijos debe ser siempre incondicional e innegociable, nunca debemos usar el cariño como chantaje, pues para formar a personas seguras de sí mismas es imprescindible que el niño sepa que sus padres siempre lo amarán.
3. No dejarles tomar decisiones
Cuando los niños son pequeños, los padres son sus guías. Pero eso no quiere decir que siempre deben imponerle ideas. A medida que los niños crecen es fundamental que comiencen a tener mayor autonomía y tomar decisiones propias. De este modo, aprenderán que sus acciones y decisiones tienen consecuencias.
4. No dejarles expresar sus emociones
Los niños desde pequeños deben aprender a identificar sus emociones, ya sean tristeza, enojo o alegría. Por eso es vital conversar acerca de cómo se sienten ellos y cómo creen que se sienten los demás y no terminar las conversaciones con el clásico “no llores” o “no te enojes”.
5. Permitirle todo
Un niño no podrá ser feliz si no se les ponen reglas y límites claros, imponiendo su voluntad cuándo, cómo y dónde se le antoje.
González dice que los niños necesitan escuchar la palabra “NO” de la boca de sus padres, porque les ayuda a desarrollar la sana convivencia, y regirse por las normas y no sus deseos irrefrenables.
6. Pegarle
Tal como explicamos en un artículo anterior, la violencia o las agresiones físicas no son educativas, por lo tanto, no cambiarán a futuro la conducta de los niños..
Los golpes sólo lograrán que el niño se victimice porque lo castigan con golpes o gritos, pero no aprenderá el “por qué” de lo que hizo está mal. Además, creerá que las agresiones son una manera de resolver conflictos

¿Tus hijos pasan más de 3 horas en el computador o la TV? Experto explica peligros de este hábito

Desde pequeños expuestos a tecnología.

¿Has notado que tu hijo(a) pasa la mayor parte de su tiempo frente al computador y no comparte con la familia ni con sus amigos? Si la respuesta es sí, significa que debes preocuparte y tomar cuanto antes medidas para revertir esta situación.
El exceso de esta práctica expone a los niños al desarrollo de algunas enfermedades como lesiones en sus brazos y cuello (porque permanecen sentados varias horas), problemas de visión, sobrepeso, aislamiento social, déficit atencional y empobrecimiento del lenguaje, entre otros, según un estudio elaborado por Programa de Salud de Niños de California (EEUU).
¿Cómo evitar que los niños dediquen gran parte de su tiempo a ver televisión?
“El peor regalo que le podemos hacer a los niños es un televisor para su pieza”, comentó el neurólogo infantil Tomás Meza.
En Chile los niños entre 4 y 12 años ven en promedio 2 horas y media de televisión todos los días, de acuerdo a la encuesta Adimark-Time Ibope y Mindshare. Además, destinan tiempo a ocupar otros aparatos tecnológicos como celulares y computadores.
¿Por qué es peligroso que mi hijo permanezca gran parte del día jugando en el computador?
Existen niños más sensibles a ciertas frecuencias luminosas por su carga genética, por lo que al recibirlas se producen descargas anormales en el cerebro que pueden ocasionar convulsiones en casos puntuales, explicó el neurólogo. Estas situaciones han ocurrido en el mundo y pusieron en alerta a los especialistas infantiles.
Además, Meza señala que otro peligro importante es la pérdida de sociabilización porque los pequeños permanecen concentrados únicamente en los estímulos luminosos y auditivos del computador. Es decir, no inventan juegos y pierden el interés por compartir con otros niños de su edad en otras actividades. En algunos casos hasta podrían provocarse problemas en el lenguaje, porque no se comunican verbalmente.
No dedicarse a los deberes escolares, dejar de ejercitar los músculos del cuerpo (por estar mucho tiempo sentado) y perder la capacidad de asombro y de producción de nuevas ideas (creatividad), son otro de los riesgos que pueden afectar a los niños que usan excesivamente este aparato.
La vista de los pequeños también está en riesgo, según el programa californiano. Ojos cansados e irritados, además de verse afectado su desarrollo visual, son otras de las consecuencias.
¿A qué edad los niños deberían utilizar el computador por primera vez?
Pese a que no existe consenso respecto a esta pregunta, el programa estadounidense recomienda que los menores de tres años no deberían utilizar este instrumento tecnológico.
A esta edad los niños aprenden a través de sus sentidos a relacionarse con el resto y establecer los primeros vínculos afectivos, por lo que los computadores no promueven este proceso. Tampoco ayuda a que desarrollen destrezas como caminar y gatear.
El médico de la Pontificia Universidad Católica precisó que mientras más pequeño sea un niño, su organismo está menos preparado para recibir las frecuencias luminosas que emiten estos aparatos. Por lo tanto, los padres deben regular el tiempo que destinan a esta actividad.
¿Cómo incentivo a mi hijo a que se entretenga en otras actividades?
“Son los padres quienes deben dar el ejemplo a los pequeños de que sólo en determinadas instancias se pueden usar los celulares u otros artículos. Hay veces en que éstos entran a la consulta con sus niños y no son capaces de dejar los móviles de lado”.
De esta manera apunta a la responsabilidad que tienen los adultos en la formación de hábitos de sus hijos, por ejemplo, que deben respetar sus horas de sueño y no interrumpirlas por quedarse mirando la televisión hasta altas horas de la noche.
 Los padres deben poner atención a los hijos cuando éstos les hablan y mostrarles interés en establecer conversaciones. Sólo así darán valor a la comunicación cara a cara.


¿Cómo y a qué edad debo hablar de sexualidad con mi hijo? Especialistas dan su veredicto.

Instancia de comunicación.


Las dimensiones de la sexualidad
La psicóloga infanto – juvenil de la Universidad del Desarrollo, Alejandra Alarcón, explicó que se debe comenzar a hablar de sexualidad con los niños desde el momento en que éstos preguntan las primeras dudas sobre su cuerpo.Sin embargo, precisó que sexualidad no es lo mismo que relaciones sexuales, por lo que muchos adultos postergan el tema, debido a que creen que las dudas de sus hijos apuntan a este último tema.
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud en 2006 definió el concepto de sexualidad humana como:“Un aspecto central del ser humano, presente a lo largo de su vida. Abarca al sexo, las identidades y los papeles de género, el erotismo, el placer, la intimidad, la reproducción y la orientación sexual. Se vivencia y se expresa a través de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, conductas, prácticas, papeles y relaciones interpersonales. La sexualidad puede incluir todas estas dimensiones, no obstante, no todas ellas se vivencian o se expresan siempre”.
La profesional agregó que los niños son curiosos por naturaleza y desde muy pequeños comienzan a explorar su cuerpo. Por lo tanto, lo mejor es darles la mejor acogida a estas preguntas y generar así un espacio de confianza entre padres e hijos.
Enfatizó que si los padres mienten o entregan información errónea pueden aumentar la curiosidad en torno al tema, generar morbo o incluso promover la desconfianza y la búsqueda de respuestas en las personas menos indicadas, o a través de otros medios como internet.
Respecto a la edad en que los padres deben conversar sobre este tema con sus hijos, Daza precisó que las conversaciones “deben comenzar desde que las personas nacen”. Explicó que tanto las caricias propiciadas en los primeros años y las enseñanzas acerca de las conductas que deben tener las niñas y niños ante ciertas situaciones, constituyen ámbitos de la sexualidad.
La sexualidad en las etapas de desarrollo
Para conversar con los niños las distintas dimensiones de la sexualidad, la psicóloga Alejandra Alarcón explicó que los adultos deben considerar la edad y el grado de entendimiento de los niños sobre este tema. Además de dar una respuesta concreta a la pregunta y asegurarse de que el menor comprende lo que se le está enseñando.
Explicó que desde los primeros meses de vida la sexualidad debe ser vista como algo natural y los padres pueden abordarlo enseñándole las distintas partes de su cuerpo y el nombre de sus genitales. Es importante que los hijos aprendan los nombres correctos de sus órganos, por ejemplo no decir “pirulín” y aclarar que su nombre es “pene”.
Alrededor de los 2 a 3 años a los niños les gusta tocar, por lo cual es una buena etapa para abordar los límites entre lo público y lo privado, cuáles son sus partes íntimas, el cuidado y protección de éstas, así como la desnudez. De esta forma son instauradas las primeras estrategias de autocuidado..
Luego, alrededor de los 4 años el interés radica en el área biológica. Por ejemplo, por qué existen diferencias entre el cuerpo de hombres y mujeres, o de dónde vienen los bebés y cómo éstos nacen. Ante esto, la profesional recomendó preguntar a los niños sobre qué diferencias ven con sus pares o qué piensan sobre su cuerpo.
Luego, desde los 4 a los 6 años, los menores están en plena etapa de exploración de su cuerpo y el mundo que los rodea. Por lo tanto, es probable que la masturbación aparezca como un tema que preocupe a sus padres. En este sentido, la psicóloga explicó que los padres deben aceptarlo como una conducta transitoria y natural de su etapa de desarrollo. Sólo así será vivido sin angustia.
Además los adultos deben reforzar el autocuidado, recordándole a los niños que ninguna otra persona puede tocar sus partes íntimas.
¿Cómo nacen los bebés? La respuesta a la clásica pregunta que los padres evitan
Respecto a la pregunta sobre cómo son concebidos los bebés, la psicóloga precisó que lo importante es dar una respuesta sencilla y en palabras simples para que ellos puedan entenderlas. Por ejemplo, que la mamá en su cuerpo tiene un lugar especial donde se forman y crecen los bebés.
Si ellos insistente piden mas información, se puede complementar explicando que cuando los papás quieren tener un bebe, juntan sus cuerpos y a través de sus órganos genitales el padre produce un espera que se encuentra con una semilla que posee la mamá. Cuando éstos se unen comienza a crecer un feto en la “guatita” de la mujer. Luego de esperarlo 9 meses, el bebé nace a través de la vagina de la mamá con la ayuda de un médico.
Enfatizó que es importante contarles que es una instancia en la que los padres se entregan ternura y cariño, y que también es una forma de expresar su amor.
Preocupaciones en la pubertad y adolescencia
A medida de que los niños crecen tienen mayor noción sobre este tema. Por lo tanto, los padres pueden profundizar en aspectos más íntimos de la sexualidad e incorporar afecto y respeto por el otro.
Alejandra Alarcón agregó que es importante ayudarlos a entender los cambios que experimentará su cuerpo. Por ejemplo, el crecimiento de los senos y la menstruación en las niñas; así como la erección y eyaculación en los niños.
La profesional explicó que es fundamental que el padre y la madre conversen de este tema con los niños. Es una falsa creencia que es un asunto padre-hijo o madre-hija. Si ambos se muestran abiertos y preocupados del tema, la sexualidad podrá ser vista como un proceso positivo y natural.
Respecto a la edad en que los padres e instituciones escolares deben entregar información sobre métodos anticonceptivos y enfermedades de transmisión sexual, el ginecólogo Pedro Daza enfatizó que debe comenzar a los 10 años.
Agregó que esta información debe ser abierta y abordar temas como el acto sexual, uso de preservativos, las enfermedades que pueden ser contraídas, lo que significa un orgasmo y el papel del amor en esta temática.
La primera cita con el ginecólogo
Daza también explicó que los padres y adolescentes deben estar atentos a algunas señales que podrían alertar sobre la necesidad de asistir al ginecólogo. Por ejemplo, cuando existe una alteración en el desarrollo biológico de la persona que no está acorde con su edad. Por ejemplo, niñas con crecimiento precoz de sus mamas.
Otros casos como menstruaciones muy dolorosas, sobrepeso y exceso de vellosidad en las mujeres son también indicios de que se debe ir al médico para descartar algunas enfermedades como el Síndrome de Ovario Poliquístico.
El diagnóstico de estos padecimientos es posible a través de chequeos biológicos y enseñanzas acerca de hábitos para combatir dichos problemas en el futuro.
Respecto a si los ginecólogos deben informar a los padres cuando sus hijos asisten en búsqueda de anticonceptivos sin el consentimiento de éstos, el especialista explicó que no existe un consenso acerca del actuar de los profesionales.
El ginecólogo indicó que prima el derecho a la confidencialidad entre el médico y el paciente. En su opinión los adolescentes son autónomos respecto a su sexualidad, por lo tanto, por tratarse de un proceso íntimo deben acudir cuando ellos estimen conveniente al médico, y obtener así la información que requieran para tomar sus decisiones. De esta manera tendrán una salud reproductiva y sexual estable.
Sin embargo, enfatizó que este criterio puede cambiar caso a caso. Por ejemplo, si una adolescente de 14 años presenta tendencia suicida producto de una experiencia traumática tras una relación sexual, el médico debe intervenir y conversar con sus padres. Es decir, cada vez que la vida del paciente o de otras personas estén en peligro.
Ante esta problemática, el abogado César Espinoza explicó que en el sistema público los médicos deben seguir las políticas de salud instauradas a nivel nacional, por lo que deben entregar anticonceptivos a menores de edad si éstos lo solicitan. Sin embargo, en el ámbito de la salud privada esto queda a criterio del médico que los atiende.


lunes, 2 de septiembre de 2013

BIENVENID@S!!!


Junto con saludarte quiero agradecer tu visita a la página, Aquí encontraras información relevante acerca de las conductas de nuestros niños y jóvenes en la actualidad y encontrarás respuesta al porqué de este comportamiento.
En Chile, el problema de conducta violenta, consumo de alcohol y drogas, conductas sexuales de riesgo, trastornos alimentarios, nutritivos y otros se han convertido en temas de Salud Pública que no está suficientemente asumido y no se le ha dado aún la atención que se merece.
El objetivo de este blogger es explorar las evidencias actuales de los efectos de la televisión y videojuegos a través de material informativo, recursos didácticos, opiniones y/o experiencias    de aprendizaje y conducta de niños y jóvenes con el fin de entregar recomendaciones a las familias y profesionales de la salud que trabajen con niños y más aún para orientar a la comunidad.

 Atte: Giselle Paillán Barría
Estudiante Educación Diferencial
Universidad Austral de Chile
Sede Puerto Montt.

Entretención infantojuvenil, 2013